Postre Rápido de Plátano y Chocolate

Anoche y más o menos por sorpresa nos dejaron el niño unos amigos a cenar.
La criatura es una delicia de niño, pero tiene muy mal comer. Está en la fase de que no le gusta nada y a todo lloriquea.

De primero y para que se dejara de mimos tontos, hice de cena puré de coliflor con patatas. De segundo, y como se lo comió todo él sólo y casi sin llorar, un sándwich de salami. Y de postre me tocó improvisar mientras se cocía la coliflor.

Abrí la nevera y vi dos plátanos grandecitos y un bote de chocolate líquido que compré para celebrar la eurocopa y aún rondaba por ahí y me puse a inventar a lo Ferrà Adriá con mi espíritu creador en pleno auge jajajjaa.

El caso es que partí los plátanos en rodajas y los coloqué sobre un plato grande. Los cubrí con varias líneas de chocolate líquido. Cogí unas cuantas galletas maría y las machaqué en el mortero. Coloqué por encima una montaña de migas de galleta y le eché más chocolate hasta que me pareció suficiente. El resultado fue el que veis en la foto.

A Arturo le encantó, y eso que ya tenía la tripa muy llena de puré, salami y pan; pero hizo un esfuerzo y se terminó el postre enterito. Bueno, aclaración jajajaja, la foto es todo el postre que nos comimos entre los tres ¿eh? El niño se comió unas cinco rodajas de plátano y dos cucharadas de migas con chocolate.
Merece la pena ver el cambio de su cara cuando vio el plato de montaña. Él esperaba un plátano tal cual y se encontró con ese superplato..... :-)

Recomendación por si sois poco imaginativo con los postres: tened a mano siempre chocolate líquido, convierte todo lo que toca en una delicia sorprendente.